publicación Online
 
 
el periodico de saltillo
Enero 2016
Edición No. 323


Malos augurios para Torreón 2016

Manuel Padilla Muñoz.

Nos llega el nuevo año del 2016 pero nada bueno para el futuro de nuestro municipio; muy por el contrario, todo parece indicar que seguirá la misma política de saqueo y opacidad aún cuando el alcalde Miguel Ángel Riquelme haya presumido en su informe de gobierno ser el municipio más transparente de Coahuila. Los hechos contradicen sus palabras y una vez más se demuestra que miente y seguirá mintiendo a los torreonenses.

Por su importancia, en esta ocasión quiero transcribir un correo que me ha enviado Participación Ciudadana 29, la organización de la sociedad civil más importante en Torreón:

“Se nos fue el año 2015 y en cuestiones ciudadanas avanzamos poco: le reclamamos al gobierno su mala gestión, su opacidad, su falta de transparencia, su poca intención de integrar a la opinión pública en los quehaceres políticos, su incapacidad para muchos asuntos, pero no hemos sido capaces de asumir nuestro papel responsable como ciudadanos que somos. Es cierto que el Gobierno municipal y estatal han dejado mucho que desear, es cierto que tenemos que hacerle muchos reclamos, es cierto que hay muchos servidores públicos con una incapacidad que duele, también es cierto que el gobierno ha hecho de la mentira y el engaño un arte, el pan nuestro de cada día; pero… ¿Dónde estamos nosotros? No es posible que nos conformemos con ver que algunas de las grandes avenidas están iluminadas y que eso nos baste para acreditar el proyecto de “La Ciudad mejor iluminada de México”.

Ya llevamos dos años con este problema y sigue sin resolverse. ¿Dónde quedaron aquellas dudas del inicio? ¿Ya se nos olvidó el fraude de la licitación? ¿No nos acordamos que las lámparas nos las están vendiendo mucho más caras de lo que cuestan? ¿Por qué no alcanzamos a dimensionar lo que significa un contrato a 15 años y cuál va a ser su costo y más aún quiénes serán los beneficiados?

¿Por qué se retiraron de la competencia las otras empresas que intentaron originalmente hacer el proyecto? ¿Y el fideicomiso que no se firmó? ¿Por qué esto no levanta la suficiente suspicacia para protestar, o creemos tener un benefactor anónimo que no nos cobrará el trabajo? ¿Y la fianza que no podemos conocer, si es que existe? ¿También se nos olvidó que sólo licitó una empresa y que eso no es legal, aunque se haya incluido una cláusula al final del contrato en donde esto se acepta?

¿Por qué dejamos que una empresa de creación reciente y poca experiencia se hiciera cargo de este contrato tan grande? ¿Por qué tanto misterio en quiénes son los socios o dueños de tal empresa? ¿Por qué dicha empresa está registrada en el Registro Público de la Propiedad de un lugar de Jalisco? ¿Por qué tanto disgusto del contralor, del tesorero, del primer regidor y del alcalde cuando se les hacen los cuestionamientos al respecto?

¿Por qué no nos damos cuenta de la mala calidad de las instalaciones todos los días cuando anochece? ¿Por qué se hizo una licitación privada cuando hay un programa federal Tripartita (CFE, Banobras y Cimee) para los gobiernos municipales en el que se puede modernizar el alumbrado a lámparas LED, con un retorno de tres o cuatro años? ¿Por qué nos quedamos callados cuando nuestras autoridades nos contestan que este contrato es único y de vanguardia en el país?

¿Por qué no levantamos la mano cuando diversas organizaciones civiles y empresariales han señalado lo mal planeado que está y el alto costo que implica? ¿Por qué no los apoyamos uniéndonos, cuando sabemos que va en detrimento de todos nosotros y nuestros descendientes? ¿Quién pensamos que nos va a “hacer la tarea” y defender esta tierra?

¿En qué momento nos volvimos tan irresponsables y superficiales para no darnos cuenta de lo que sucede a nuestro alrededor? ¿Cuándo perdimos la capacidad crítica en beneficio de la comunidad? ¿En nuestros hogares aceptaríamos un trabajo de tan mala calidad sin cuestionarlo? Necesitamos encontrar las respuestas.

Y esto es sólo el alumbrado, pero está SIMAS, Obras Públicas, ISN, la chatarra y un sinnúmero de temas más en los que hay muchas dudas que por lo visto la Administración Municipal no tiene intención de aclarar. Pero… ¿De quién es la culpa?

Ojalá este nuevo año que viene, nos haga más participativos y analíticos y con esto podamos reconocer lo bueno de lo malo, para con ello reclamar lo que por derecho nos merecemos, siempre en beneficio de nuestra querida región.

Yo me preguntó: ¿Por qué, si los especialistas aseguran que cada luminaria del “nuevo” alumbrado cuesta 12,500 pesos, la vamos a pagar en más de 40 mil pesos? ¿Dónde están las 60 mil lámparas del viejo (y mejor) alumbrado? La pista nos la proporciona la información publicada en el periódico “La Voz”, de Frontera, Coahuila: “Amador Moreno López, Presidente Municipal de Frontera, señaló que en los últimos días de noviembre el Municipio recibió la donación de 500 lámparas por parte de Miguel Ángel Riquelme, Alcalde de Torreón, mismas que no se han instalado porque están en reparación y servirán para refacción.”

Las viejas luminarias son propiedad del pueblo de Torreón; no son propiedad particular del alcalde Miguel Riquelme. ¿Por qué el edil torreonense no dijo la verdad al pueblo de Frontera y, perversamente, lo hizo como si fueran de su propiedad, adquiridas de su propio peculio? Porque, como se demuestra una vez más, en un mentiroso contumaz: y aquel que miente una vez seguirá mintiendo siempre.

La verdad es que Miguel Ángel Riquelme saluda con sombrero ajeno porque quiere ser candidato a suceder a Rubén; y lo puede hacer con el apoyo de éste; sin embargo, nunca será gobernador por su enana talla mental y política. Si no, analicemos lo que publicó el periódico El Siglo de Torreón al comentar el informe de gobierno de Riquelme: “Otro aspecto que generó comentarios entre el respetable fue la fuerte presencia de medios de comunicación de otras ciudades coahuilenses, principalmente de Saltillo, Monclova y Piedras Negras (como si a los saltillenses, monclovenses y nigropetenses les importara mucho lo que pasa con Torreón y sus autoridades, en fin).

De pronto, a algunos observa- dores les pareció que estaban en un informe de gobernador más que de munícipe por la presencia y acarreo de gente de diversas partes del estado. Por supuesto no podía faltar el gober Rubén Moreira, quien al terminar el discurso de su colabo- rador, le lanzó hartas flores de todo tipo que hasta uno pensaría que lo anda candidateando y hasta desta- pando (ups, ¿lo dijeron o lo pensaron los subagentes?).

No obstante, don Rubén causó intriga entre los asistentes cuando dijo que el alcalde Riquelme va a cumplir con sus compromisos hasta 2017, año en que concluye la administración, o que depende de lo que digan los demás alcaldes y priistas.

Todo indica que este asunto de los destapes, suspiros y especula- ciones que en la entidad se ha convertido en un deporte comienza a divertir hasta el propio señor gobernador. “O sea, millones de pesos de chayotes para los “periodistas” foráneos.

Siento pena pues, decirles a los miembros de Participación Ciudadana 29 y a los miles restantes de torreonenses, que nunca recibirán respuesta clara de esto de parte del alcalde Miguel Ángel Riquelme, pues es uno de los más jugosos y millonarios negocios de su pandilla de predadores del erario público de Torreón.

En su discurso, se ostenta como el municipio más transparente; en la realidad, es todo lo contrario. Si no, señor alcalde, póngale fecha al diálogo donde declaró Usted que responderá a todas las dudas de los ciudadanos. Nunca habrá tal fecha, estamos seguros. ¡Que se jodan los torreonenses!

manuelpadillaperiodista@hotmail.com


 

 
© 2014 El Periódico de Saltillo contacto@elperiodicodesaltillo.com

 

 

 

 

 

 

 

 

 

     
carton noviembre 09 Noviembre 09 Rufino