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el periodico de saltillo
Enero 2015
Edición No. 311



53 millones de mexicanos pobres en el país

La pobreza en Coahuila



“Pobreza estado de necesidad, carencia y rezago”.
Julio Boltvinik Kalinka.


Luis Fernando Hernández González.

El Estado mexicano en la amplitud de la expresión, federación, estado y municipio, han asumido por medio de sus leyes, políticas públicas y programas el compromiso de garantizar el pleno ejercicio de los derechos sociales y de esta forma asegurar el acceso de toda la población al desarrollo social. En este contexto, el reflejo más crudo e inaceptable de los rezagos sociales que persisten en nuestro país es la pobreza identificado ésta con el hambre, lo cual impone graves limitaciones para el desarrollo físico y social, niega la igualdad de oportunidades y evidencia el fracaso de nuestra sociedad para abatir las enormes desigualdades sociales que en ella persisten.

Aun cuando en las últimas décadas se han registrado progresos en diversos indicadores del desarrollo social, los desafíos prevalecientes en materia de superación de la pobreza obligan a reforzar y complementar las políticas y programas sociales a fin de apuntalar los logros hasta ahora alcanzados. En un contexto económico, social y político complejo, es indispensable emplear los recursos disponibles de la mejor manera posible para garantizar que los programas sociales lleguen de manera efectiva a quienes más vulnerabilidad representa tanto urbana como rural de la población.

El compromiso de garantizar que todas las personas cuenten con lo mínimo indispensable para vivir y tengan condiciones para un éxito productivo, es prioridad en Rubén Moreira Valdez, a pesar de las dificultades técnicas-financieras que presenta el atender a las familias con mayores niveles de pobreza y marginación el estado se ha dado a la tarea de que esas familias tengan por igual el acceso a las políticas públicas de desarrollo social.

La principal característica de la política social de esta administración para atender la pobreza extrema, no está basada en acciones asistencialistas al contrario, está fundamentada en mejorar las prácticas en materia de desarrollo social y humano de los tres órdenes de gobierno y así, establecer programas y acciones que mejoren la calidad de vida de las familias y de una manera marginal, apoyar la economía familiar con sencillos pero significativos apoyos que se traducen en bases que representan variables estímulos al hogar al contar con programas sociales.

Sabemos que la mejor manera de contribuir a resarcir la situación que presentan en nuestro estado más de 93 mil personas en pobreza extrema registradas por el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL), es sin duda el que cuenten con un ingreso económico permanente y que esté, este por arriba de la línea de bienestar mínimo, al ser un factor macroeconómico que es el reflejo del poder adquisitivo de las personas a la vez que refleja la situación económica de los sectores sociales del país.

Por ello, en Coahuila se iniciaron acciones para mejorar la calidad de vida en el marco de la medición multidimensional de pobreza que lleva a cabo el propio CONEVAL, es decir se contribuyó a mejorar las viviendas particulares con techos, pisos, ampliación de habitaciones y pintura y arreglo de fachadas, se mejora la infraestructura en electrificación de lugares apartados, se otorgan mensualmente apoyos alimentarios, se auxilia para abatir el analfabetismo y la deserción escolar, se incorporaron a la servicios de salud a aquellas familias carentes de este servicio mediante el seguro popular, ampliando capacidades clínicas y hospitalarias, entre otros.

Es importante señalar que en los primeros tres años de la administración de Rubén Moreira, se han creado más de 85 mil empleos formales, acción que contribuye junto con el componente social a superar las condiciones de vida de los coahuilenses.

Para atacar y combatir la pobreza

CONEVAL debe emitir un conjunto de lineamientos y criterios para la definición, identificación y medición de la pobreza, en los cuales habrá de considerar al menos los ocho indicadores siguientes:

• Ingreso corriente per cápita.
• Rezago educativo promedio en el hogar.
• Acceso a los servicios de salud.
• Acceso a la seguridad social.
• Calidad y espacios de la vivienda.
• Acceso a los servicios básicos en la vivienda.
• Acceso a la alimenta- ción.
• Grado de cohesión social.

La ley para la Prevención y Combate a la Pobreza en el Estado de Coahuila de Zaragoza señala que el objeto de la ley es reducir la pobreza extrema en el estado, procurar la igualdad de oportunidades y la ampliación de capacidades, para que todos los coahuilenses que viven en esta condición, mejoren su calidad de vida y tengan garantizado el derecho a la alimentación, acceso a los servicios de salud y seguridad social, educación, calidad y espacios de la vivienda, el acceso a servicios básicos y un medio ambiente adecuado para su desarrollo que favorezca el grado de cohesión social en el estado.

La encuesta “Coahuila Habla” es un registro de las condiciones socioeconómi- cas de los hogares ubicados en áreas con rezago social del estado, que mediante la aplicación de cuestionarios durante los meses de febrero y marzo de 2012, se obtuvo información sobre las características de las viviendas y las condiciones de desarrollo de sus ocupantes con la finalidad de instrumentar de manera focalizada los programas sociales.

El registro define cuántas y cuáles viviendas están en rezago social, los materiales de construcción con que están hechas y si cuentan con los servicios de energía eléctrica, agua y drenaje. Así como también los nombres de cada una de las personas que habitan dichas viviendas, su nivel educativo, ocupa- ción, ingresos y los servicios de salud con los que cuenta, entre otros aspectos.

 
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