¡Felicidades Presidente!

Arnulfo Favila Izaguirrre.

University of Texas at Austin. Muy buena elección Señor Presidente. La que han hecho Usted y su familia, claro. Una ciudad donde florece el arte, la cultura, la educación, el deporte. Su calle 8, envidiable. Sus edificios emblemáticos, sus museos; sus Long Horns. Y en medio de aquella metrópoli de personalidad universal: don Felipe Calderón Hinojosa, gis en mano, se dispondrá a impartir cátedra a partir de enero próximo. La más hermosa ciudad de Texas con su implícita seguridad, desarrollo armonioso, calidad de vida y de nivel educativo para sus hijos.

Muy bien, Señor Presidente. Mientras nosotros, los mexicanos, seguiremos viviendo en las condiciones que Usted ha dispuesto para SU país. Entre las balas y granadas de una lucha que a casi seis años no se le ve el fin. En un sistema educativo rehén de su gran aliada, La Maestra Elba Esther. En un campo abandonado y muchos millones de pobres. Aquí estaremos Felipe, en este país que dejarás y en el que ahora, ya ni sacarse el melate es una aspiración legítima de mis compatriotas.

Pero mi felicitación al Presidente no es a Calderón, es al Presidente del Senado, a Manlio Fabio Beltrones Rivera, que ha sabido hacer y deshacer política. Que supo entretejer la intriga de su participación activa, pasiva, nociva o benéfica en el proceso de sucesión presidencial. Al Manlio que acordó y amagó a Calderón, al que se dio a respetar y temer por Peña Nieto, a quien los gobernadores -todos- le observan atentos y su bancada le obedece sin réplica. Al ex gobernador que compartió el poder con Calderón y que hoy corona su destreza con la reforma constitucional en materia política recién aprobada.

Jugó como nadie. Engañó a Peña, convenció a Calderón, a sus contrapartes en las Cámaras, a todos. Con el dulce de que Peña podría tomar posesión fuera de San Lázaro, en una sede alterna y en su caso también, protestar ante los ministros de la Suprema Corte. Con ese señuelo se dejó ir el candidato priista. Entre candidaturas ciudadanas, iniciativa preferente y consulta popular, Manlio robustece lo que le interesa.

La verdad oculta de la reforma es la fortaleza y perfeccionamiento que se le da a la figura del Presidente Interino, a ese hombre que elegiría el pleno del Congreso de la Unión y que gobernaría la República durante dieciocho meses. La dedicatoria del retoque legislativo es obvia. Nadie más que Manlio para gobernar los dieciocho meses siguientes a la mudanza de Calderón a Austin, Texas.

El otro PRI, El Nuevo PRI, El PRI de Moreira y Peña, ha reaccionado tarde. No la vieron, no leyeron y por ende no actuaron. Hoy, a destiempo, y luego de que Calderón recibe a Peña y a su “equipo de transición” y les marca el alto: -Hay que esperar a que el proceso legal concluya-, dijo tajante el futuro profesor de la University of Texas.

Con cajas destempladas salieron los transitorios y su candidato y abrieron los ojos. El Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación anticipa un fallo “transparente e inédito”. El tema de la transición se borró de las agendas. Andrés Manuel declara: “No veo mal la figura del Presidente Interino”.

Mientras tanto, el cuerpo legal de campaña, de partido, de candidato y hasta del Estado de México, se deshacen en negar lo que al final aceptan, con algunos asegunes; primero que MONEX no, luego, que siempre sí, pero que fue para capacitación regular, de gasto ordinario de partido. Que SORIANA tampoco, luego que también, pero que lo hicieron los gobiernos estatales como apoyos a programas sociales. Luego la cuenta de SCOTIABANK, que no existía, luego que sí, pero que es del Estado de México.

En suma todo existe, las pruebas ahí están, incluso ratificadas a confesión de parte, aun y que no admitan el propósito. Esperemos pues el fallo “transparente e inédito” del TRIFE.

Carlos Jiménez Macías, vocero del PRI espeta consternado en una iniciativa infértil: “Que se acorte el período presidencial actual y que el Presidente electo tome protesta el primero de septiembre en conjunto con el legislativo”. ¿Cuál es la prisa, don Carlos? Se acaba de aprobar una reforma política. ¿O se le acaba de ocurrir?

Así pues, la interlocución privilegiada que encarna el sonorense le anticipa ser el mediador de un arranque de mandato controvertido que mucho tendrá que ajustar y dialogar con todas las fuerzas políticas. Y si de paso, la resolución del tribunal basa lo inédito en lo que es: Lo que nunca ha sucedido, y se anula la elección; bueno, pues ahí está el perfeccionamiento de la figura del Presidente Interino. ¡Felicidades Presidente!

P.D. Rubén Moreira pudiera bien acordar los temas del campo con Noé Garza Jr, y no con Noé Garza Flores. Se mete en todo, pide cuentas, usa recursos y por supuesto que sabe más.

P.D. II. Martha Laura Carranza se convierte en la jefa de jefas. ¿Cuñas para los enriquistas? Si, Chema incluido.